Internacional
LAS ELECCIONES DE MÉXICO EN LA ÓRBITA MUNDIAL

Guillermo Rocha Lira

Guillermo Rocha Lira

¿Qué tan importante es el proceso electoral mexicano para la comunidad internacional? ¿Cómo se perciben en otras regiones del mundo las elecciones del próximo domingo 1° de julio en México? ¿Cómo influyen los grupos de poder trasnacionales en los protagonistas de la elección venidera en nuestro país? Las condiciones de interdependencia de una sociedad mundial globalizada indican que el proceso electoral en México será de la mayor relevancia para la región latinoamericana, y desde luego, el resultado definirá las condiciones de negociación en América del Norte con el TLCAN y repercutirá en la relación política y comercial con las naciones de Asia-Pacífico; redefinirá los intereses con Europa y el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea; y por supuesto afectará las relaciones con los países sudamericanos y centroamericanos.

¿Por qué México es tan relevante para el mundo? Forbes retoma un estudio de la consultora mundial PwC que calcula que para 2050 México podría convertirse en la séptima economía más importante del planeta y su PIB podría superar al de Alemania, Japón, Reino Unido y Francia. Entre las potencialidades de nuestro país se encuentran su producción petrolera y energética, su potencial exportador, su posición geográfica privilegiada y su bono demográfico favorable. Hay que señalar que Pwc es la firma de servicios profesionales más grande del mundo en auditoría, consultoría y asesoramiento legal y fiscal a las principales compañías, instituciones y gobiernos a nivel global.

Sin lugar a dudas, los poderes económicos y financieros internacionales están pendientes del avance del proceso electoral mexicano. Por ejemplo, el Fondo Monetario Internacional afirmó que las elecciones en México y Brasil son de la mayor relevancia para la economía regional y mundial. Según este organismo, la incertidumbre previa y posterior al día de la jornada electoral en ambas naciones podría frenar la reducida recuperación que experimentó la región en el último lustro. Según el FMI esto podría agravarse si los gobiernos electos de ambos países giran hacia políticas proteccionistas.

En cuanto al caso brasileño, el FMI señaló que dependiendo de los resultados electorales, en octubre podría darse un escenario de mucha volatilidad en el mercado e incertidumbre financiera en el mediano plazo; mientras que en el caso mexicano, el organismo advirtió que el establecimiento de políticas estatistas o regresivas, así como un endurecimiento de las condiciones financieras mundiales repercutirían en las expectativas de crecimiento para los próximos años. En síntesis, las elecciones en México y Brasil son clave para el crecimiento de América Latina, señaló el organismo.

En el caso particular de la región de América del Norte que comparte México con Estados Unidos y Canadá, los avances y retrocesos de la relación multilateral giran en torno a tres factores principales: la tensa negociación del TLCAN, la reforma tributaria en Estados Unidos y, desde luego, la definición del proceso electoral mexicano. Este último factor determina en gran medida la continuidad de las futuras negociaciones sobre el tratado regional, las cuales están detenidas por la incertidumbre política en México. Es muy probable que nuestros socios y vecinos del norte esperen el resultado electoral del 1 de julio para fijar una postura política y comercial.

El Grupo Eurasia, una consultora integrada por expertos financieros, empresariales y gubernamentales a nivel mundial, especializada en análisis de riesgos, realiza cada año estudios para gobiernos y empresas sobre oportunidades y amenazas potenciales derivadas de las crisis gubernamentales o cambios en la economía mundial. En enero del presente año, este grupo presentó su Top de Riesgos 2018 en el que sorprendentemente ubican al proceso electoral mexicano como uno de los principales factores, cuyo resultado puede alterar la economía regional. El grupo Eurasia califica a la elección mexicana como un factor de riesgo potencial en el cuarto lugar mundial, por encima de otros problemas regionales como el diferendo nuclear entre EE. UU. e Irán, la seguridad regional en África por el terrorismo y la tensa relación de Reino Unido con la Unión Europea.

Según el Grupo Eurasia, los mercados financieros y los inversionistas ven con buenos ojos el potencial de la economía mexicana; sin embargo, existe el riesgo de la implementación de políticas estatistas o regresivas que provoquen un cambio radical en la percepción de los actores internacionales en relación con México.

En su decimotercera edición, el Reporte de Riesgos Global del Foro Económico Mundial también destaca al caso mexicano como un punto de inflexión para la economía regional y mundial. El reporte hace referencia a la ola proteccionista que ha tomado fuerza en los últimos años en países como Reino Unido y Estados Unidos, y cómo esta tendencia proteccionista puede afectar las negociaciones del TLCAN (NAFTA, por sus siglas en inglés) y la economía mexicana.

En prestigiados medios de comunicación internacionales, las elecciones en México están catalogadas como procesos electorales marcados por la violencia y las agresiones sistemáticas contra candidatos de todos los partidos. Deutsche Welle de Alemania resume el año electoral latinoamericano como una “avanzada populista”. Uta Thorfen, especialista en temas de México y Latinoamérica, considera que el populismo es el común denominador de todos los procesos electorales de la región. La revista Forbes en inglés publica en su página web un artículo denominado “México 2018: populismo vs prudencia”, del analista Nathaniel Parish. Su autor afirma que nuestro país se acerca a una de sus más importantes encrucijadas, mientras que el proceso electoral transcurre en un clima de violencia generalizada y amenazas contra los candidatos. El artículo destaca la polarización del país, que se balancea entre un proyecto modernizador y un populismo regresivo que podría provocar que la estabilidad mexicana se desvanezca, como acontece en Venezuela.

Otros prestigiados medios internacionales como Times, la BBC y The Guardian enfatizan el hecho de que la violencia y la presencia del crimen organizado ensombrecen el proceso electoral mexicano, al cual califican como el más violento de la historia, ya que ha dejado 79 candidatos asesinados.

El periódico The New York Times publicó un artículo en mayo de este año en el que destaca el uso indiscriminado de bots y troles pagados para desestabilizar las presentes elecciones en México. El medio afirma que en la elección más importante de la historia prevalece un ambiente enrarecido de desinformación y noticias falsas (fake news) que confunden y pueden reorientar la preferencia del electorado. En entrevista en el programa de Carmen Aristegui, el director de Mesura aseguró que el comportamiento de la disputa electoral digital demuestra que se están utilizando bots en las campañas electorales de la Ciudad de México. La presencia de bots y uso de inteligencia artificial son cada vez más comunes debido a la digitalización de las campañas y el avance de las telecomunicaciones en todo el mundo.

El día 20 de mayo tuvo lugar en la ciudad de Tijuana, Baja California, el segundo debate presidencial, en el que una vez más quedó claro que existen dos visiones diferentes: una progresista que impulsa el proyecto de Por México al Frente, representado por Ricardo Anaya, y otra proteccionista y regresiva, encabezada por Andrés Manuel López Obrador.

En la plataforma electoral de la coalición Por México al Frente se enfatiza la necesidad de fortalecer la posición de México frente al mundo, porque México tiene el potencial de consolidarse como protagonista de las relaciones internacionales. En la plataforma de la coalición se destaca la urgente necesidad de redefinir nuestra relación estratégica con Estados Unidos con un enfoque integral, desarrollado a partir de nuestra dependencia mutua y otorgándole prioridad a nuestros intereses nacionales.

En el debate presidencial de Tijuana Ricardo Anaya insistió en diversificar la relación comercial con Estados Unidos, pero aún más importante es replantear la relación política a través de una postura digna, de respeto, cooperación y firmeza con nuestro vecino del norte. Los problemas transfronterizos de la aldea global como los movimientos migratorios, el calentamiento global, el tráfico de armas y el crimen organizado internacional requieren de la colaboración de todos los países. En este contexto de interdependencia, Estados Unidos necesita de México, pero también nuestro país, por su posición estratégica, necesita ser un factor determinante en el avance de la región de América del Norte y América Latina. Fortalecer la soberanía de México significa intensificar nuestra relación con otras regiones y países aliados y también representa una oportunidad para contrarrestar la vulnerabilidad económica y de seguridad que supone nuestra dependencia hacia el vecino del norte.

En este sentido, Ricardo Anaya destacó que México tiene la obligación moral de tratar al prójimo como queremos ser tratados, por eso la cooperación con los países centroamericanos también debe ser de respeto y protección de los derechos de los refugiados y los migrantes que provienen de otros países. México no sólo debe ser protagonista en el aspecto comercial, sino también debe consolidarse como un referente cuya política exterior defienda los principios democráticos y promueva los valores de pacifismo, solidaridad y respeto a los derechos humanos.

El tema migratorio es uno de los puntos más importantes en la plataforma electoral de Por México al Frente, como: el hecho de incorporar en los acuerdos de libre comercio cláusulas relativas al flujo migratorio, a los derechos de los trabajadores y a los asuntos medioambientales; impulsar el cabildeo con el Congreso de Estados Unidos para posicionar el interés nacional de México en temas sensibles como la política migratoria, la seguridad y el libre comercio en América del Norte; fortalecer la defensa de los derechos humanos y laborales de los migrantes mexicanos en Estados Unidos y el resto del mundo; empoderar a las comunidades de origen mexicano dentro de los Estados Unidos apoyando su agenda y fortaleciendo su contribución a los intereses de México, y generar acciones para apoyar la regularización de los llamados dreamers; evaluar y diseñar nuevos programas de apoyo a migrantes mexicanos para identificar áreas no cubiertas, priorizando el apoyo legal y la asesoría; promover un nuevo programa de cooperación en materia de seguridad entre México y Estados Unidos bajo el enfoque de la reducción de la violencia y la seguridad ciudadana, que trate con la misma importancia los tráficos ilícitos de ambos lados de la frontera (estupefacientes hacia Estados Unidos, armas desde Estados Unidos hacia México); y garantizar el respeto irrestricto de los derechos humanos de las personas inmigrantes, principalmente centroamericanas, en su tránsito por nuestro país.

Durante el debate presidencial, Ricardo Anaya realizó tres propuestas puntuales sobre este tema: 1) Lograr la reinserción de los migrantes a la vida laboral y comunitaria: 2) Garantizar su representación en el Congreso de la Unión; 3) Duplicar los recursos a los consulados y poner énfasis en la protección de sus derechos. Movimiento Ciudadano en particular le ha dado especial atención al tema migrante y su representación, ya que ocho de sus candidatos al Congreso de la Unión son migrantes.

México tiene un enorme potencial económico comercial y puede impulsar una política exterior digna que sea decisiva para el crecimiento de todo el continente y el mundo. Lo que pase el 1 de julio no sólo es importante para nuestro país, sino también para otras regiones, por lo que no es permisible volver a políticas regresivas o estatistas; en cambio, es fundamental apoyar propuestas innovadoras y progresistas que consoliden a nuestro país como potencia mundial de frente al futuro.