EDGAR GONZÁLEZ RUIZ
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¡Oh, los que entráis, dejad toda esperanza!
Dante Alighieri, Canto III del “Infierno” en La Divina Comedia
La puerta del infierno es uno de los trabajos más ambiciosos del escultor francés Auguste Rodin (1840-1917) no sólo por su belleza, sino por lo monumental que resulta la obra que mide más de seis metros y medio de altura, casi cuatro metros de ancho, y pesa 6 mil 700 kilogramos. Con su arribo al Museo Soumaya Plaza Carso, se celebra la adquisición definitiva de uno de los ocho ejemplares que existen en el mundo, único en América Latina, así como los 30 años de la Fundación Carlos Slim.
Para la creación de esta obra maestra, Rodin se inspiró en La Divina Comedia de Dante Alighieri, y en Las flores del mal, de Charles Baudelaire, así como en La Puerta del Paraíso, realizada por el italiano Roberto Ghiberti para el Baptisterio de Florencia. En 1880 el Ministerio de Cultura francés encomendó al escultor una puerta decorada para el museo de Artes Decorativas de París, donde se establece actualmente el Museo de Orsay.
La exposición La puerta del infierno estuvo integrada por más de un centenar de obras, entre ellas 14 yesos inéditos que fueron restaurados para la ocasión por especialistas nacionales y franceses. Gracias a un convenio de colaboración entre los museos Soumaya y Rodin de París, éste último prestó de manera temporal 50 piezas que se exhibieron hasta el pasado 11 de septiembre.
