El éxito de Movimiento Ciudadano en Durango es la prueba de que la lealtad, la congruencia y el compromiso generan confianza
E
l resultado electoral de Durango y Veracruz confirma lo que ya sabíamos: Movimiento Ciudadano es la alternativa que la ciudadanía estaba buscando, consolidándose ya como la segunda fuerza política del país. Pero la pregunta que muchos se hacen es: ¿por qué hemos logrado conectar con la gente de esta manera?
La respuesta no está en una campaña ni en un solo proceso electoral. La respuesta está en la memoria de un movimiento que se ha construido con resiliencia, lealtad y congruencia, valores que impulsaron la lucha ideológica de nuestro líder, Dante Delgado, en todo el país y que hoy se ven reflejados en todos los estados.
En mi tierra, Durango, esa historia se cuenta a través de la valentía de figuras que abrieron camino: la lealtad de la Dra. Marta Palencia, el compromiso de Martín Vivanco, la congruencia de Jorge Salum y la determinación de Patricia Flores. Todas y todos ellos demostraron que este movimiento no se rinde. Ahora, con Omar Castañeda al frente, Durango presenta sus mejores resultados, demostrando que la credibilidad se gana con hechos, no con discursos vacíos. Hoy nuestro coordinador nacional, Jorge Álvarez Máynez, respalda ese esfuerzo y lo proyecta hacia un México Nuevo.
Estoy orgulloso de formar parte de un movimiento que abre las puertas al talento ciudadano, que no depende de cuotas ni de cuates, que valora a quienes trabajan por convicción y no por conveniencia.
Porque Movimiento Ciudadano no solo gobierna bien cuando tiene la oportunidad —como lo hemos demostrado en Jalisco, Nuevo León y Campeche capital—, sino que también sabe ser una alternativa responsable, propositiva y constructiva. Recordemos el rol que jugó Enrique Alfaro antes de ser gobernador: desde la oposición logró mejorar las acciones del gobierno en turno al marcar agenda y poner a trabajar a los servidores públicos. O cómo Jorge Álvarez Máynez ha logrado construir una nueva visión de país al mantener una crítica constructiva al gobierno federal, señalando, pero también sumando esfuerzos por lo que más le convenga al país, sin regateos ni mezquindades.
Hay quienes creen que ser oposición es negarse a todo, pero nosotros entendemos que ser oposición es demostrar que otra forma de hacer política es posible. En Movimiento Ciudadano levantamos la voz para defender lo que merece la ciudadanía, proponemos y ponemos a trabajar a los gobiernos. Esa es la diferencia.
En Durango lo hemos comprobado: desde el primer día, como bancada naranja en el cabildo, hemos trabajado para rescatar espacios públicos, mejorar las condiciones laborales en el municipio y promover rutas recreativas que fortalecen la salud mental y la convivencia familiar; impulsar el transporte público eléctrico incluyente con tarifas preferentes para estudiantes; exigir calidad en las obras de pavimentación; atender las contingencias climáticas; mejorar los servicios de recolección de basura; recuperar las unidades deportivas abandonadas; vigilar que la calidad del agua cumpla con las normas sanitarias; llevar caravanas de arte y cultura a las colonias marginadas; reducir gastos en imagen gubernamental para invertir en infraestructura agrícola; lograr el sistema de cuidados; e incrementar el equipamiento y salario de las y los policías. Esa es la política que la gente reconoce, la que transforma la ciudad desde lo cotidiano.
El éxito de Movimiento Ciudadano en Durango es la prueba de que la lealtad, la congruencia y el compromiso generan confianza. Y la confianza, cuando se cuida, se convierte en fuerza. Estamos orgullosos de lo que hemos logrado y seguiremos trabajando para construir el mejor Durango de la historia.

