Editorial
ESPECTRO DE UNA SOCIEDAD

No será fácil, pero más allá de la necesaria reconciliación después de las campañas que culminaron en las elecciones federales y estatales del pasado 1° de julio, el gobierno, las organizaciones sociales y políticas de México deberán esforzarse por imbuir en la ciudadanía la formación plena de una conciencia nacional.

No será fácil, decimos, porque los agravios del poder público a la sociedad mexicana son mayúsculos, acrecentados por actitudes maniqueas empeñadas en atribuir la realidad del país a la confrontación de los buenos contra los malos.

Será insuficiente un catálogo sexenal de buenos deseos, por genuinos que sean, si no se acompaña de una visión de Estado a la altura de las exigencias que plantean el crecimiento demográfico, el desarrollo y la democracia.

Los daños originados por la ineptitud, la arrogancia y la soberbia de nuestros gobernantes están a la vista: más de 50 millones de compatriotas lastimados por la pobreza; más de la mitad de los estados de la República asediados por bandas criminales; secuestros, asesinatos y ejecuciones a plena luz del día; homicidios a mansalva de candidatos y periodistas…

Millones de mexicanos, incluso quienes votaron por el candidato presidencial triunfador, Andrés Manuel López Obrador, escucharon durante meses los qué y los por qué. Pero el explicable ánimo revanchista, ávido de desquite en las urnas, no dispuso de tiempo razonable para reflexionar en los cómo. Hay que abrir espacio a las respuestas y a las propuestas, y propiciar los debates públicos necesarios a partir de ahora y durante los cinco meses que faltan para que inicie el nuevo gobierno.

En 1993 el Fondo de Cultura Económica (FCE) publicó una edición del libro biográfico Santa Anna: espectro de una sociedad, del escritor jalisciense y ex titular de la Secretaría de Educación Pública, Agustín Yáñez (1904-1980).

En lugar de reseña para aquella edición (que vio la luz pública por primera vez en 1982), en la presentación del libro el FCE apuntó que Yáñez había logrado reunir en la figura del muy controvertido personaje veracruzano, Antonio López de Santa-Anna (1795-1876), “la suma de gustos, estilos, convencionalismos y modos que transitoriamente adoptan los grupos sociales predominantes, en particular cuando no han llegado a la plena formación de una conciencia nacional”. De ahí el título del libro: el espectro de la sociedad mexicana ante un hombre que ocupó 11 veces la Presidencia de la República.

En 2014, más de 30 años después de aparecido el libro de Yáñez, el entonces Instituto Federal Electoral y El Colegio de México publicaron el llamado Informe País sobre la calidad de la ciudadanía en México. Los investigadores concluyeron que “la ciudadanía nacional atraviesa por un complejo proceso de construcción que se caracteriza por la desconfianza entre las personas y hacia la autoridad, especialmente en las instituciones de procuración de justicia… y por el desencanto con los resultados que ha tenido la democracia”.

Precisaron además que: “Hablar de ciudadanía integral es considerar que el ciudadano de hoy debe acceder armoniosamente a sus derechos cívicos, sociales, económicos y culturales, y que todos ellos conforman un conjunto indivisible y articulado”.

El marco conceptual y las dimensiones de esa ciudadanía integral son: 1) Estado de Derecho y acceso a la justicia; 2) Vida política; 3) Sociedad civil; 4) Vida comunitaria; 5) Valores; 6) Acceso a bienes demandados por los ciudadanos y 7) Cultura de la legalidad.

Movimiento Ciudadano hace suyos esos postulados.