Proyecto ciudadano para méxico

El salón Don Alberto del hotel Alameda Hilton se mantuvo al máximo de su capacidad durante todo el evento.
tannia rosas

Con el apoyo de Movimiento Ciudadano y convocadas por la Fundación Lázaro Cárdenas, Por México Hoy A.C. y la Fundación Friedrich Ebert Stiftung, el miércoles 25 de enero de 2017 se realizaron en el hotel Alameda Hilton de la Ciudad de México las Mesas de Diálogo “Proyecto Ciudadano para México”.

La participación de relevantes conferenciantes y analistas puede resumirse en un punto central coincidente: México necesita un proyecto ciudadano promotor de un profundo cambio económico, político y social que devuelva el poder a los ciudadanos, que ponga a las fuerzas de la sociedad por encima de los partidos, que haga posible que los mexicanos se organicen con unidad, por encima de nombres, colores y membretes.

Aparte los directivos de las instituciones organizadoras, los conferenciantes y quienes participaron en las mesas de diálogo, el salón Don Alberto del hotel Alameda Hilton estuvo a toda su capacidad (y más allá) por la asistencia de organizaciones sociales, académicos, estudiantes y periodistas.

PROYECTO CIUDADANO PARA MÉXICOA José Francisco Melo Velázquez, Secretario de Organización y Acción Política, correspondió hacer la presentación del evento con estas palabras iniciales: “Justo cuando la construcción de muros de odio y populismo agreden a la dignidad de los mexicanos, justo ahora que el malestar económico y políticas insensibles generan la mayor irritación ciudadana y los peores niveles de aprobación y confianza en las instituciones, justo hoy nos damos cita para construir puentes de entendimiento, dialogar, compartir propuestas para convocar, organizar y empoderar a la ciudadanía”.

En sus palabras de bienvenida, Hans Mathieu, representante en México de la Fundación Friedrich Ebert Stiftung, hizo referencia a la difícil relación con el actual gobierno de Estados Unidos, pero advirtió que México pasa por tiempos muy difíciles: corrupción, crimen organizado, violencia, enojo de la sociedad e incremento de conflictos sociales. Por eso, añadió, es importante hablar de la posibilidad de construir un nuevo proyecto de Nación, que incluye construir el poder de los ciudadanos.

Al inaugurar las Mesas de Diálogo “Proyecto Ciudadano Para México”, Dante Delgado, Coordinador Nacional de Movimiento Ciudadano y Presidente de la Asamblea General de la Fundación Lázaro Cárdenas, lamentó que México tenga hoy una clase política sin clase, sin honor, sin principios y sin preparación, así como un Estado represor.

Agregó que ante tal panorama, el país necesita una nueva política que surja desde la ciudadanía, que haga valer una mayoría que ya existe y rescate a las instituciones que llevan demasiado tiempo secuestradas por una pequeña minoría. “Poner a las fuerzas de la sociedad por encima de los partidos, demostrar que es posible organizarnos por encima de nombres, colores y membretes. México necesita un proyecto ciudadano y este Movimiento estará al servicio de ese proyecto”, subrayó.

Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, presidente de Por México Hoy A.C., ofreció la primera conferencia magistral, titulada Un nuevo proyecto de nación. Se refirió en ella a la urgencia de revertir en definitiva el alza a los precios de los combustibles. “El gobierno, afirmó, no debe seguir abonando a la inestabilidad interna, ya que mantenerse en el neoliberalismo depredador y entreguista sólo aumentará la dependencia del exterior y contribuirá con una mayor concentración del ingreso en los grupos ya de por sí más privilegiados y, con todo ello, a aumentar la irritación social”.

PROYECTO CIUDADANO PARA MÉXICO-2Añadió que, como nunca antes, México se encuentra en las condiciones de mayor deterioro político, social y económico; las últimas décadas han sido de retroceso continuo dentro de un modelo de desarrollo impuesto por intereses ajenos y el entreguismo local en calidad de socio menor, en el que la economía se ha vuelto más dependiente y socialmente depredadora, se han destruido tejidos productivos en sectores clave”.

Aseveró el ingeniero Cárdenas que existe un profundo desánimo social, una creciente desigualdad en la distribución del ingreso, incremento de la pobreza y un fuerte descrédito institucional, así como una irrefrenable corrupción dentro y fuera de las esferas oficiales protegida por la impunidad, a lo que se debe agregar las amenazas que han empezado a llevarse a la práctica del presidente de los EU.

En el tema de la política exterior manifestó que el gobierno federal está paralizado, e hizo un llamado al titular del Ejecutivo para cancelar su visita a EU y buscar una posición digna frente a la confirmación de la construcción del muro. “De cumplirse las promesas de Donald Trump, algunos de los peores problemas de México se agudizarán”.

Para concluir, exhortó a hacer una amplia convocatoria en todo el país para construir la base social y política que impulse al proyecto, pero anticipó que debe haber unidad y se tiene que ir más allá de los individuos a fin de generar una revolución política. “Conviene hacer un llamado a todos los grupos que se identifican con las izquierdas, gente sin partido y con partido, una reunión sin jerarquías ni candidatos”.

Durante la mesa de diálogo “¿Cuál es el proyecto que México necesita?”, el escritor Juan Villoro manifestó que es posible imaginar un país diferente si se combate la apatía militante. “Hace falta otra respuesta, la respuesta ciudadana. Pasar de una democracia representativa a una democracia participativa”, enfatizó.

“¿Qué hacer? Un movimiento que apele a objetivos precisos. A aquellos que nos puedan unir, que rescate la soberanía nacional. Una lucha contra la discriminación. Un llamado a caminar juntos”, indicó. El escritor hizo hincapié en la debilidad de la política exterior mexicana frente a las amenazas del exterior. “Mientras el presidente de EU construye un muro, el presidente de México sólo habla con la pared”, advirtió.

La politóloga Lourdes Morales llamó la atención sobre el hecho de que todos los partidos han sido metidos en el mismo paquete de descrédito, en muchos casos de manera justificada, por los bonos, por los casos de corrupción, por el abuso constante. Pareciera, agregó, que no hay diálogo posible que pueda restablecer esta confianza y la interlocución que necesitamos; en consecuencia, apuntó, se necesitan liderazgos fuertes, creíbles, enraizados en la ciudadanía; sólo un liderazgo así podrá ayudar al diálogo que necesitamos y a una articulación entre movimiento y fuerza política.
La izquierda, dijo, debe reivindicar las voces y los derechos de los más desposeídos, y más en un país como México, pero no puede quedarse restringida a los sectores marginales y menos preparados porque así no tendrá las capacidades para gobernar y enfrentar los retos que requerimos.
El senador Alejandro Encinas dijo en su intervención que es necesario canalizar el hartazgo de la sociedad frente a la clase política. “Tenemos que construir un movimiento que se convierta en una mayoría y que sea una oposición real que recupere nuestro país”.

Afirmó Encinas: “Son nuevos tiempos y tenemos que hacernos cargo de la enorme indignación, del hartazgo popular frente a la clase política, frente a los políticos, las instituciones públicas y los partidos políticos que hoy, como pocas veces, han estado tan distantes, tan ajenos a la gente y a las causas sociales”.

Otra participación fue la del maestro Víctor Manuel Borrás, quien hizo referencia particular a la gran contaminación de la publicidad en todos los medios de comunicación; aun cuando se dice que hay muchísima reglamentación al respecto, afirmó, la verdad es que no se respeta. Debemos lograr, dijo, que los medios de comunicación sean una herramienta que esté al servicio de toda la sociedad y no se desempeñen únicamente como voceros del gobierno en turno.

En la segunda conferencia magistral, El poder de los ciudadanos, Mauricio Merino lamentó el descrédito de las instituciones y dijo que lo que hay que hacer es decirnos la verdad. “Estamos ante la necesidad de un proyecto democrático que le dé sentido y reflexión a la vida política, y no debemos creer que un sólo cambio de mando ayudará. Vamos a revolucionar el país desde las instituciones y necesitamos una revolución en las conciencias de la ciudadanía”.

Merino aseveró que nunca se habían tenido tantos medios para revertir los abusos de quienes han humillado la dignidad del país. “Tenemos la posibilidad y el deber de exigir transparencia y que se respeten los derechos. Tenemos que trabajar por el empoderamiento de los ciudadanos”.

En su severa crítica, Mauricio Merino añadió que la democracia no es un problema de turnos. Tenemos que recuperar su sentido. La democracia no es propiedad de los intermediarios. “La revolución que le hace falta a este país es una en donde los gobernantes y legisladores no sean corruptos. Para cambiar a México es necesario que nos organicemos y recuperemos el poder que nos ha sido arrebatado”.

En la mesa de diálogo “Devolver el poder a los ciudadanos”, Emilio Álvarez Icaza, defensor de los derechos humanos, expresó que nuestro dilema tiene que pasar por la construcción de valores democráticos. “La indignación no es suficiente. Tenemos que cambiar la furia por alegría”.

A su vez, el periodista Ricardo Raphael aseguró que no es posible cambiar el país si tenemos una clase política que no toma en cuenta a la sociedad. “El atasque como forma de gobierno se ha reproducido y replicado por parte de los malos gobernantes. Nos llegó la hora de ser adultos y hacer una política que mire a los ciudadanos y trabaje a su lado”.

Para dar por concluidas las Mesas de Diálogo “Proyecto Ciudadano Para México”, el doctor Alejandro Chanona, presidente de la Fundación Lázaro Cárdenas, dijo que estas mesas nos permiten encontrarnos y pensar juntos un nuevo proyecto de nación.

En esta jornada participaron Lourdes Morales, politóloga de la Red por la Rendición de Cuentas; Víctor Manuel Borrás, economista; Jesús Rodríguez Zepeda, académico de la UAM y María de los Ángeles Moreno, catedrática de la UNAM. Como moderadores participaron Pilar Lozano Mac Donald, Secretaria General de Acuerdos de Movimiento Ciudadano, y el diputado federal Jorge Álvarez Máynez.